Noite e Dia
En las doctrinas hindúes se dice que lo que es día para el comprehensor de su verdadera naturaleza real…~ es noche para el que ignora su verdadera naturaleza real…~ y que lo que es noche para el comprehensor…~ es día para el ignorante…~
Cuando uno mira a cuando este estado nacimiento no era…~ y se ve a sí mismo incondicionado…~ absolutamente libre de todo comienzo y de todo final de nada en él…~ absolutamente libre de la sensación de ser…~ donde no se conoce que yo soy lo que yo soy…~ donde no se conoce esta vida de servidumbre de la sensación…~ Cuando uno mira a cuando este estado nacimiento no era…~ y se siente a sí mismo absolutamente en casa…~ y se ve a sí mismo sin ojos…~ y se escucha a sí mismo sin oídos…~ y se abarca a sí mismo sin tener dimensiones…~ sin ser grande ni pequeño…~ y sin que medie movimiento alguno…~ Cuando uno mira a cuando este estado nacimiento no era…~ y se ve a sí mismo como un abismo insondable absolutamente familiar…~ absolutamente íntimo…~ donde no hay ni yo ni mío…~ donde no nace ni prospera ningún mundo…~ ni de sensación ni de intelección…~ donde la consistencia del ser de uno es que es ser a secas…~ sin dualidad…~ sin conocimiento…~ sin sensación…~ absolutamente libre de esta vida de sensación…~ y de toda otra vida concebible…~ ya sea infinita o aeviternal…~ Cuando uno mira a cuando este estado nacimiento no era…~ y lo que encuentra es a sí mismo sólo…~ a esto se llama el Día del Comprehensor de su verdadera naturaleza real…~ Este es un Dios verdadero en que jamás amanece ni anochece…~ y cuyo Sol es la saboreación íntima de que se trata de uno mismo…~
Este estado de sensación…~ donde se siente la sensación de ser…~ donde se siente la propensión a exclamar “yo y mío”…~ este estado de vida de sensación y de intelección finita…~ es una noche cerrada para el comprehensor…~ Yo no me veo a mí mismo en él…~ El cuerpo no me toca…~ la mente no me toca…~ el alma no me toca…~ el espíritu no me toca…~ el ego no me toca…~ ni “yo” ni “mío” me tocan…~ la sensación de ser no me toca…~ Nada en este estado de sensación finita es mí mismo ni mío…~ Yo no los he hecho…~ Yo no sé en qué consisten…~ Su comprensión está completamente cerrada a mí…~ Cuando miro a este estado de sensación finita…~ lo único que veo es lo que no era conmigo…~ Lo que yo soy está absolutamente manifiesto a mí…~ y al mirar a este estado de sensación y de intelección finita…~ lo único que veo es lo que no es conmigo…~ Este estado de sensación y de intelección finita es una noche cerrada para mí…~ Cuando le miro no me encuentro a mí mismo en él…~ no tengo ninguna familiaridad ni intimidad con él…~ no sé en qué consiste…~ yo nunca lo he pedido…~
Cuando alguien que no ve su verdadera naturaleza real mira el estado cuando el nacimiento no era…~ ve realmente su propia naturaleza verdadera…~ ve esa ausencia absoluta de “yo y mío”…~ ve esa ausencia absoluta de toda vida de sensación y de intelección…~ No se ve a sí mismo como este cuerpo y mente y alma y espíritu que cree ser…~ Ahí no hay ningún nacido y mortal como él…~ Entonces…~ esta misma visión le aterra bajo el disfraz de la muerte…~ Efectivamente…~ para el que no ve su verdadera naturaleza real…~ la visión del estado cuando el nacimiento no era…~ aparece como la más cerrada de las noches…~ como el más temible de los abismos…~ el abismo de la desaparición absoluta de esta vida de sensación y de intelección finita que él llama “mí mismo y mío”…~