Guénon Qualidade e Quantidade

RENÉ GUÉNON — REINO DA QUANTIDADE E SINAL DOS TEMPOS

VIDE: Essência-Substância, Forma-Matéria

CUALIDAD Y CANTIDAD

Bien comprendido eso (Essência-Substância e Forma-Matéria), podemos hablar de la esencia y de la substancia de nuestro mundo, es decir del que es el dominio del ser individual humano, y diremos que, conformemente a las condiciones que definen propiamente este mundo, estos dos principios aparecen en él respectivamente bajo los aspectos de la cualidad y de la cantidad. Eso puede ya parecer evidente en lo que concierne a la cualidad, puesto que la esencia es en suma la síntesis principial de todos los atributos que pertenecen a un ser y que hacen que este ser sea lo que es, y puesto que atributos o cualidades son en el fondo sinónimos; y se puede destacar que la cualidad, considerada así como el contenido de la esencia, si es permisible expresarse así, no está restringida exclusivamente a nuestro mundo, sino que es susceptible de una transposición que universaliza su significación, lo que, por lo demás, no tiene nada de sorprendente desde que ella representa aquí el principio superior; pero, en una tal universalización, la cualidad cesa de ser el correlativo de la cantidad, ya que ésta, por el contrario, está estrictamente ligada a las condiciones especiales de nuestro mundo; por lo demás, desde el punto de vista teológico, ¿no se refiere de algún modo la cualidad a Dios mismo al hablar de sus atributos, mientras que sería manifiestamente inconcebible pretender transportar del mismo modo a Él unas determinaciones cuantitativas cualesquiera?1. Quizás se podría objetar a eso que Aristóteles coloca la cualidad, así como la cantidad, entre las «categorías», que no son más que modos especiales del ser y que no le son coextensivas; pero es que entonces no efectúa la transposición de que acabamos de hablar, y es que, por otra parte, no tiene que hacerlo, puesto que la enumeración de las «categorías» no se refiere más que a nuestro mundo y a sus condiciones, de suerte que la cualidad no puede y no debe tomarse realmente en él más que en el sentido, más inmediato para nosotros en nuestro estado individual, en el que ella se presenta, así como lo hemos dicho desde el comienzo, como un correlativo de la cantidad.




  1. Se puede hablar de Brahma saguna o «cualificado», pero no se podría hablar de ninguna manera de Brahma «cuantificado». 

René Guénon