Coomaraswamy (Aurora) – Sujata

Hace tiempo que opinamos que Apâlâ es Sujâtâ en la leyenda del Buda. En los Jâtakas ( I, 69 ), hija de un colono, ella desea un marido, y entrega leche como ofrenda al Bodhisattva, que está sentado ante el árbol de Bodhi en la vigilia del Gran Despertar. De hecho, Sujâtâ se convierte en la esposa de Indra. El relato más completo se encuentra en el Jâtaka nº 31, texto I, p. 205. Sujâtâ es aquí la cuarta sirviente ( pâdaparicârikâ ); las otras tres, difuntas, renacen ( análogamente ) en el mismo estado, gracias a su virtud; pero Sujâtâ, “ya que no había cumplido ningún acto de virtud” ( kusalalamassa akatattâ, cf. la nota 15 ) renace en forma de grulla. Indra le busca, le encuentra, le instruye, y demuestra con una prueba que su corazón ha cambiado. Ella renace entonces en la familia de un alfarero. Indra le busca, le encuentra, y le hace un regalo en recompensa a su virtud. Ella renace una tercera vez, hija del Asura Vêpacittiya —no olvidemos que los tres nacimientos corresponden a las tres purificaciones de Apâlâ- y, gracias a su virtud, es muy bella ( abhirûpa ). Su padre ( que corresponde a Tvashtri en las versiones “Surya” ) la engalana para el matrimonio y reúne una asamblea de Asuras con el fin de que escoja un marido. Indra adopta “el color o el aspecto asura” ( asuravannam = asurya-varnam, lo que corresponde a X, 85, 30, ya citado ), se presenta en la asamblea ( un real svayamvara ) y Sujâtâ le elige como esposo; él la convierte entonces en su reina principal. Indra representa, en este cuento, una encarnación anterior del Buda. En la última encarnación, en la que el Bodhisattva ya no es identificado con Indra ( en el sentido de la dualidad védica Indrâgnî ), las necesidades del relato no permiten que Sujâtâ se convierta en la esposa del Buda, y ella sigue siendo la de Indra —aunque podamos pensar que la actual esposa del Bodhisattva, Yashodharâ, sea en realidad el alter ego de Sujâtâ.

Examinados los textos paralelos, es útil notar que el Rig-Veda dice en más de una ocasión que Ushas es “Sujâtâ”1 . Y la designación de Ushas como Magnonî ( I, 124, 10 y VII, 75, 5 ) sugiere ya a Maghavan, es decir, a Indra2 . Igualmente, estamos obligados a identificar a las kanyâ y sujâtâ de nuestros textos con la sukanya, hija de Sharyata, que se convierte en la mujer de Cyavana en el Shatapatha Brâhmana ( IV, 1, 5 ), pero como ello requeriría un estudio de la identidad de Cyavana, Atri y otros, debemos dejar este asunto de lado y retomarlo en otra ocasión. Puede no obstante señalarse que, si el Sol es oscuro cuando lleva las vestiduras de Krityâ, el inveterado ( jîrnah ), Cyavana tiene también “el aspecto de Krityâ” ( krityâ-rûpah ), jahê, “él fue abandonado”, corresponde a “dejemos aquí al inútil” ( atra jahâma… ashêvah, X, 53, 8 ) y a “yo abandono al Padre” ( pitaram jahâmi, X, 124, 4 ); en fin, el nombre de Cyavâna o Cyavana, “caído”, se encuentra en esta misma estrofa ( X, 124, 4 ): “Agni, Varuna y Soma declinan” ( cyavantê ). Cf. también la “quíntuple ofrenda” realizada por Sûnritâ a Brahmanaspati3 ( I, 40, 3 ).


NOTAS

1 Usho dêvî… sujâtê, I, 123, 3; divo duhitar… ushah sujâtê, VII, 77, 6. Precisamente, es debido a su “buen nacimiento” ( sujâtatâ ) que la Aurora vence a su hermana, X, 172, 3.
2 En el Budismo palí, Sujampati, el “esposo de Sujâ”, es un epíteto de Indra ( por ejemplo Samyutta Nikaya, I, 225 ).
3 No una “entidad” independiente, sino un nombre esencial de Agni, como claramente se dice en Rg Veda Samhita, I, 38, 13.

Ananda Coomaraswamy